Hoy se me casa María

Hoy se me casa María, mi noviecita querida, la flor que yo cultivaba, tierna, dulce y preferida, ya me van a ver por ahí desangrando por la herida. No voy a tener las fuerzas para soportar mi caída ni la caña ni otro amor podrán sacarme esta espina que me hiere, me trasnocha, me tortura y me fulmina…