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INTRO:
Maracaibo florido, Maracaibo de antaño
aquel mi Maracaibo de estilo colonial
son mis recuerdos vivo tus fiestas patronales
las fiestas con pasquines de la Chiquinquirá. (Bis)
Divíno el Maracaibo aquel de las palmeras
el de las contradanzas y lago de cristal,
allí do se bañaron las musas prepotentes
de Vásquez y de Pérez, de Yépez y Baralt.
Aquel mi Maracaibo con alegres gaiteros
y estampas naturales para la navidad
no me olvidaré nunca de Germán, del Gallego,
de La Flor de la Habana por su zulianidad.
Yo llevo aquí en mi mente las imágenes frescas
de aquellos carnavales repletos de color,
y veo las carrozas por la calle Derecha
desfilando pomposas frente a San Juan de Dios. (Bis)
INTERLUDIO:
Divíno el Maracaibo aquel de las palmeras
el de las contradanzas y lago de cristal,
allí do se bañaron las musas prepotentes
de Vásquez y de Pérez, de Yépez y Baralt.
Aquel mi Maracaibo con alegres gaiteros
y estampas naturales para la navidad
no me olvidaré nunca de Germán, del Gallego,
de La Flor de la Habana por su zulianidad.
Yo llevo aquí en mi mente las imágenes frescas
de aquellos carnavales repletos de color,
y veo las carrozas por la calle Derecha
desfilando pomposas frente a San Juan de Dios.(Bis)
VIDEO DE LA CANCIÓN
Maracaibo Florido originó un impasse entre Rafael Rincón y Armando Molero debido a una modificación que este último hizo para como le dijera a Rafael «hacer que se oyera mejor». En realidad, Don Armando le hizo dos. Una de menor impacto que la segunda. La primera la adoptaron los distintos cantores que la interpretaron, Tino Rodriguez, El Parroquiano Astolfo Romero (a mi gusto, la mejor versión) y hasta Simón Díaz. Creo que Rafael al final la aceptó porque me dijo, era un «licencia musical» que tanto usó él. Pero jamás la segunda al igual que los demás intérpretes. Allí ardió Troya. La última vez que nos juntamos Rafael y yo fue en mi cumpleaños en mi casa en 2003 él tocando mi guitarra Tatay comprada en 1974 y yo en mi cuatro que me regalaron en 1984. Amanecimos y en ese largo rato que estuvimos me contó la historia de Maracaibo Florido y Armando Molero. Y hay que reconocer con Don Armando siempre será recordado como uno de los grandes de los bambucos y valses. Mis dos favoritos son Cumpleaños y Destello de Amor. Hace 2 días se cumplieron 8 años de la muerte de mi amigo Rafael.