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INTRO:
Yo sentí los rigores de una herida, al saber que de mí ya te alejab as;
y en mi recuerdo, romántico anidaba el espectro glacial,
glacial de tu partid a.
No te imaginas cuán sufrí en tu ausencia,
fue un crudo invierno sobre el alma mí a;
y al sentir el rigor de tu inclemencia
fue una pena tenaz, tenaz, ruda y sombrí a.
Por qué partiste sin decirme nada, sin ti mi vida es triste y pesaros a;
es un cielo sin luz, sin alborada; es un jardín sin pájaros ni rosas.
INTERLUDIO:
Es un cielo sin luz, sin alborada; es un jardín sin pájaros ni rosas.
Estoy en Maturín.
Felicidades, yo también aprendí de forma empírica, luego de saber lo básico, ingresé a la escuela de música Nuñez Romberg, creo que así se escribe, luego de ingresar a esta escuela en el año 1992 para inscribir a mi hijo Diego. Terminé inscribiéndome yo. Aún sigo tocando y cantando. Tengo un conjunto de música criolla con instrumentos repetidos. Amo esta música nuestra. La comparto con el Derecho que es mi profesión. Realmente quisiera jubilarme para dedicarme a mi adorada música. Soy poeta y tengo muchas canciones las cuales no he podido mostrárselas a alguien que realmente las evalúe, con mi letra y música. ..los amo mis músicos venezolanos.gracias x esta dedicación de difundir lo nuestro. Un beso. Fanny Ferrer.